El coaching consiste en liberar el potencial de un individuo para que pueda dar lo mejor de sí mismo: se trata de aprender a aprender, en lugar de enseñar. El buen coaching es una herramienta para que las empresas pasen de hacer “lo de siempre” a hacer lo que mejor pueden hacer.
“Dime y lo olvido, enséñame y lo recuerdo, involúcrame y lo aprendo” Benjamin Franklin. Al emplear coaching en la capacitación se maximizan los resultados al involucrar a los participantes en su proceso de aprendizaje. Capacitar al personal mejora el desempeño en un 22% y cuando se agrega coaching, la mejora alcanza hasta el 88%, según datos de International Personal Management Association.
El coaching presenta una propuesta de transformación que se arraiga en las conversaciones que las personas tienen, tanto consigo mismas como con los demás, ampliando así la efectividad de su organización. El entrenamiento tendrá un impacto significativo en la vida de cada participante.
Resultados:
Fidelización de los colaboradores
Constituirse en una organización cordial y agradable para los clientes
Alineación de visión y valores
Unificar los esfuerzos en pro de un resultado global
Creación y fomento del trabajo en equipo
Mayor capacidad para el logro de los resultados propuestos
Mayor capacidad para comunicarse en forma clara, directa y completa
Mayor tendencia a actuar evitando las postergaciones
Mayor pro-actividad en función de los objetivos (ponerse la camiseta)